El creciente avance de los grupos de izquierda en América Latina, a juicio de la diputada argentina María Celeste Ponce, está perjudicando a la sociedad; por ello, sugiere la creación de un colectivo internacional de derecha para contrarrestar los efectos de esta ideología en la región.
Mencionó que la izquierda ha sabido introducirse en los países latinoamericanos a través de discursos nobles y humanos que no siempre reflejan su realidad, adoctrinando a los seres humanos para que piensen y actúen de acuerdo con principios que atentan contra sus garantías fundamentales.
"Ellos quieren justamente que no haya fronteras y las cabezas de los individuos, por eso, invito a toda la gente de América, y por qué no de Panamá, a que no dejen que la izquierda con una bandera noble termine pisándolos porque el más perjudicado siempre va a ser el pueblo", indicó en entrevista con EPASA.
La representante del Partido La Libertad Avanza reiteró que es importante que los ciudadanos entiendan que son quienes tienen el poder para que dejen de ser vulnerables ante estos colectivos que solo están a la espera de que las emociones los gobiernen para despojarlos de sus libertades.
"El poder real lo tiene el pueblo y eso lo debemos tener grabado en el corazón y la cabeza para defender nuestra patria y derechos individuales", manifestó.
Ponce considera que lo primero que deben hacer las sociedades para erradicar esta ideología es entender que el poder emana únicamente del pueblo, no de los políticos, como se ha impulsado en los últimos años; porque estos son solamente empleados que cumplen con ciertas obligaciones.
También se debe empezar a denunciar públicamente a quienes utilicen sus puestos para favorecerse a costa de la colectividad, ya que, los llamados "zurdos" generalmente se aprovechan del extremo poder que tienen para declararse impunes.
"Lamentablemente, muchos utilizan la palabra democracia para fingir que todo funciona correctamente y que es el pueblo el que gobierna (…), contra eso es lo que hay que luchar", advirtió.
La diputada sostuvo que aún se está a tiempo de revertir esta situación para que los países dejen de ser representados por personas "nefastas" que solo buscan su beneficio propio.
Subrayó que no se trata solo de levantar una bandera, sino de hacer las cosas bien, ser personas transparentes, fieles y honestas que mantengan sus discursos incluso después de llegar al poder.
"Se terminó esa hipocresía; se trata de realmente hacer lo que se dice, esa es la línea que tenemos que seguir todos", añadió tras su participación en el Congreso de Seguridad de las Américas, la semana pasada en la capital panameña.